Lo primero que debemos tener en cuenta durante nuestra preparación, para poder participar en una prueba que suponga un alto esfuerzo físico, es vigilar nuestra salud. Por ello os recomendamos que os hagáis una analítica general y un electrocardiograma durante vuestro periodo preparatorio.
El electrocardiograma, es una prueba que va a servirnos para registrar la actividad eléctrica del corazón: ritmo, regularidad de los latidos, tamaño, posición de aurículas y ventrículos, etc. De hecho, puede detectar incluso infartos que haya sufrido un paciente, bloqueos, arritmias u otros trastornos cardíacos.
Hace unos días que David se sometió a las pruebas anteriormente comentadas y los resultados fueron más que positivos, de modo que podemos seguir trabajando para conseguir nuestra meta.
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| David con los electrodos debidamente colocados |
Durante el electrocardiograma el paciente permanece tumbado, relajado, sin hablar, respirando normal y con los brazos y las piernas inmóviles. Es una prueba muy sencilla, apta para cualquier persona, sin dolor, ni riesgos (no se envía electricidad al cuerpo) y que dura unos cinco minutos. El paciente se tiene que desvestir de cintura para arriba y en el pecho, brazos y piernas se le colocan diez electrodos (adhesivos o ventosas), que van unidos al electrocardiógrafo por unos cables.
A continuación os dejamos con un vídeo del programa televisivo "Saber vivir", en el cual el doctor Julián Pérez Villacastín realiza un electrocardiograma y nos explica cómo interpretarlo:
¡RECORDAD QUE LO PRIMERO SIEMPRE ES NUESTRA SALUD!
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